El Sáhara, la zona árida más extensa del mundo se puede visitar desde muchos lugares, pero uno de los mejores
trayectos pasa por Merzouga. El pequeño pueblo marroquí de Merzouga se
encuentra a unos 50 kilómetros de la frontera con Argelia, y su inmejorable
ubicación la hacen idónea para vivir el desierto del Sáhara en primera persona.
Rodeada de desierto, Merzouga no tiene problemas de agua, puesto que también
cuenta con el mayor cuerpo natural de agua en Marruecos.
Además, la ciudad está
ubicada en la zona más impactante del desierto del Sáhara. Cuenta con dunas de
150 metros de altura y cuenta con otros oasis cercanos, a unos 40 kilómetros de
la ciudad. Disfruta del mejor Sáhara y de sus magníficas puestas de sol
mientras paseas por las impactantes dunas de Erg Chebbi.