Aljeromic

Geniales. Geniales.

Aljeromic. Increibles ! repetiré.

Muy bien. Todo genial, son estupendos.

ALJEROMIC. No les conocía, pero fue una noche muy divertida, les volveré a ir a ver en otra ocasión. La música.

Demasiada gente, era sábado y la sala muy llena.

Diálogos. El pasado viernes asistimos a un concierto de Aljeromic que fueron dos. La primera parte, un tanto confusa, tuvo sin embargo algunos de los mejores momentos de la noche: el esperado regreso del clown de la guitarra rítmica permitió contemplar un vibrante diálogo entre su instrumento y la guitarra solista del Johnny Depp de Moratalaz. Y, como sintiendo envidia por ello, los "elementos percusivos" les siguieron la charla. La segunda parte de la noche tuvo más lustre y más enganche; la selección de temas se prestaba al jolgorio y al dislate. Sin embargo, creo que la carga emocional de la primera parte (en la que fueron literalmente fusilados por los fotógrafos) fue la que brilló, la que mordió el nervio. En cualquier caso, otra noche más para recordar. Gracias. El espectáculo en sí.

El local es demasiado pequeño para tanto público.

Noche de Reyes. A priori se intuía una noche difícil: noche de reyes, anunciado con pocos días de antelación, sin vocalista principal... pero lo que pudo acabar como el rosario de la aurora se transformó en una verdadera parranda entre amigos. Desgranando el repertorio habitual, con no poco esfuerzo por parte de un frontman más pluriempleado que de costumbre, el combo se mantuvo imperturbable haciendo verdaderas piruetas para rubricar una noche de verdaderos Reyes Magos, en la que al final trasmutaron oro, incienso y mirra en cubos de cerveza que repartieron entre el respetable. Noche de estreno (instrumentos relucientes), de auténtica magia, en la que los temas a dos voces dejaron un regusto que esperamos volver a probar en siguientes ocasiones. Las risas y la actitud.

La panza del frontman.

Bárbaro!!. Madre mía. Sorteando la "Noche en Blanco", los Aljeromic fueron dueños y señores de la tarima. La banda suena compacta, engrasada, a punto de dar el salto hacia no se sabe bien qué lugar. Pero se les ve alerta, ya digo, como buscando un nuevo espacio. Recuperaron al emigrante Miguel Lezcano, ese Gasol de las seis cuerdas, que caracoleó y apostilló cada tema a su manera. Grande. Y el final catártico con Sambaleza, otra sorpresa (¿cuántos músicos caben en una lata de sardinas?). El dato más importante: están metidos en un circuito tres tallas más pequeño del que les sentaría bien. Y además, el momento pide un soporte físico que poder enseñar, que poder defender. Pido desde aquí esa grabación que llevan demasiado tiempo ya regateándonos.

Despedidas. Una noche para recordar, pese a la infame ecualización de sonido, en la que se despidió por una breve temporada a uno de los guitarristas del grupo, que antes de su viaje nos dejó algunas perlas en forma de solos (el de "Minor Swing" fue especialmente conmovedor). A los AlJeromic no ha parecido afectarles la ola de calor. Lejos de ralentizarse debido a la canícula, muchos de los temas se presentaron en un tempo demoledor, como si estuvieran compitiendo por ver quién acababa antes. Sorpresivamente, otros temas ("I'm Ready") en teoría más rítmicos, aparecieron sedados como envueltos en una atmósfera de opio. Un abrazo desde aquí para Fran, veremos que hacen estos apandadores del swing hasta tu regreso. El grupo.

El técnico de sonido.

Seguid así, chicos!!!. Da gusto escuchar música de verdad y no los productos en serie que se oyen por ahí. Me gustó mucho la propuesta del grupo, la mezcla de estilos (flipé con el uso del cajón junto a la batería para hacer 'blues') y debo decir que me encantó el cantante y armonicista (soy una gran seguidora de Ñaco Goñi y hacía tiempo que no escuchaba nada tan bueno). Espero volver a verlos. El único "pero" que le pongo al concierto es el lugar y es que se quedó muy pequeño para verlo cómodamente (eso de que el escenario esté en el lugar de paso no ayuda mucho). Obviamente, esto no tiene nada que ver con el grupo, pero también hay que decirlo. ¡¡¡No os lo perdáis la próxima vez!!!. El grupo, la interpretación, el repertorio, el buen rollo que transmiten...

Lo estrecho del lugar.

Imprescindibles. Esta gente, no sólo tocan muy bien, no sólo son simpáticos y transmiten mucha energía, no sólo.... sino es que también han conseguido crear su propio mundo de músicas. Blues, swing, flamenco, funky... tocan todo lo que les echen. Y lo tocan todo mezcladito y muy bien. Ante tal panorama, resulta imposible no querer bailar.Y aún más imposible no querer volver a verles tocar. No faltéis a su próximo concierto. Yo era el primero al que iba y ya tengo ganas de ir a un segundo y un tercero y un cuarto... ¡¡¡Todo!!!.

Nada que no me gustara.