Madrid y tour ibérico de 22 días

Europa es el segundo continente más pequeño en extensión después de Oceanía pero a su vez, el continente que ha tenido más influencia en la historia del mundo en cuanto a descubrimientos, conquistas, colonizaciones, revoluciones, guerras...

Sus límites están bien definidos por el mar al Norte, Sur y Oeste, y por el límite ligeramente arbitrario de los montes Urales y el río Ural, al Este. Se caracteriza por la elevada cantidad de costas marítimas y oceánicas debido a la presencia de abundantes penínsulas, golfos, mares interiores e islas. Este dato, junto con el influjo de la Corriente del Golfo y la proximidad de los desiertos cálidos de África y Asia, determinan que en Europa prepondere, pese a las latitudes, un clima templado excepcionalmente benigno para el disfrute del hombre.

El crisol de culturas y religiones predominantes (protestante al Norte, ortodoxa al Este y católica al Sur, Oeste y centro) así como su desarrollo histórico-político desde la prehistoria, hacen a Europa poseedora de tesoros arquitectónicos y obras artísticas de incalculable valor económico y cultural.

Gracias a su historia rica y su población diversa, Europa se ha convertido en uno de los destinos más visitados del mundo. Cada país ofrece un sinfín de posibilidades que visitar, tanto naturales como culturales. Hay para todos los gustos. El viajero puede elegir entre lugares emblemáticos como París y su torre Eiffel, Roma y su Coliseo, Londres y su Big Ben. Puede también elegir relajarse en las hermosas playas de la costa de España, en los mares transparentes de Grecia o en las coloridas costas de Portugal. Ya sea el destino elegido ciudad o naturaleza. Europa garantiza no defraudar a nadie y la experiencia será mil veces enriquecedora.

Bilbao, situada en el norte de España, es una ciudad en constante evolución que ha pasado de ser un antiguo centro industrial a un vibrante destino turístico. Con su rica cultura, su arquitectura moderna, su famosa gastronomía y su cercanía a la costa y las montañas, Bilbao ofrece una experiencia única para los visitantes.

Uno de los principales atractivos de Bilbao es su arquitectura contemporánea. El icónico Museo Guggenheim Bilbao, diseñado por el arquitecto Frank Gehry, es una obra maestra arquitectónica con su impresionante fachada de titanio y sus formas esculturales. El museo alberga una vasta colección de arte moderno y contemporáneo, y su interior es igual de impresionante que su exterior. Otros ejemplos notables de arquitectura moderna en Bilbao incluyen el Palacio de Congresos y de la Música Euskalduna, diseñado por Federico Soriano y Dolores Palacios, y la Torre Iberdrola, un rascacielos diseñado por César Pelli.

La cultura también es un aspecto destacado de Bilbao. La ciudad cuenta con una gran cantidad de museos, teatros y centros culturales que ofrecen una amplia gama de exposiciones y espectáculos. Además del Museo Guggenheim, los visitantes pueden disfrutar del Museo de Bellas Artes de Bilbao, que cuenta con una impresionante colección de arte español y vasco, o el Azkuna Zentroa, un centro cultural ubicado en un antiguo almacén de vino con una arquitectura sorprendente. La música en vivo es otro aspecto destacado de la escena cultural de Bilbao, con numerosos conciertos y festivales que se celebran en toda la ciudad.

La gastronomía vasca es otra razón para visitar Bilbao. La ciudad es conocida por su oferta culinaria de alta calidad, con una gran cantidad de bares y restaurantes que ofrecen pintxos, una versión vasca de las tapas, que son deliciosos bocados que se sirven en pequeñas porciones. El Casco Antiguo de Bilbao, conocido como las "Siete Calles", es un lugar ideal para disfrutar de la comida local y sumergirse en la cultura vasca. Además, Bilbao cuenta con una gran cantidad de restaurantes de alta cocina, algunos de los cuales cuentan con estrellas Michelin, que ofrecen experiencias gastronómicas de primer nivel.

La ubicación de Bilbao también la convierte en un punto de partida ideal para explorar la naturaleza que la rodea. A poca distancia en coche se encuentran las montañas de los Pirineos y los Picos de Europa, que ofrecen oportunidades para practicar senderismo, esquí y otras actividades al aire libre. Además, la costa vasca está a poca distancia, con sus playas de arena y pintorescos pueblos pesqueros, como Getxo y Bermeo, que valen la pena visitar.

Qué hacer

La ciudad de Bilbao puede dividirse en varias zonas de interés: el casco viejo medieval, el casco viejo moderno, el Ensanche o la zona de Gran Vía, entre otras. No puedes quedarte sin recorrer las callejuelas del casco antiguo para admirar sus magníficas mansiones antiguas y otros lugares emblemáticos como la Plaza Nueva y la Catedral de estilo gótico. Tampoco te puedes perder el Museo Guggenheim, de Frank Gehry, tanto por el magnífico edificio como por las colecciones de arte que alberga. Los Arcos de la Ribera marcan los límites del casco viejo medieval donde puedes visitar el Puente de la Merced y la Iglesia del mismo nombre que hoy se ha convertido en la sede del Bilborock y funciona como sala de teatro y música. El Mercado de la Ribera presenta una magnífica arquitectura y unas preciosas vidrieras. La Iglesia de San Antón, junto con el puente, forma parte del escudo de la Villa. Esta iglesia se construyó sobre las ruinas del antiguo Alcázar de la ciudad. La Plaza de Unamuno es una de las plazas con más ambiente del casco antiguo. El Arenal bilbaíno es uno de los principales lugares de paseo y celebración de la ciudad. Dominando esta zona, se encuentra el teatro Arriaga, con su impresionante edificio. Es todo un símbolo de la ciudad. Si te adentras por las Siete Calles, las más antiguas del casco histórico, llegarás a la Catedral de Santiago, dedicada al apóstol, patrón de la ciudad. Aquí también encontrarás el magnífico Ayuntamiento, la estación de Atxuri o la casa natal de Unamuno. La Plaza Nueva es una de las plazas más emblemáticas de la ciudad y recuerda a otras plazas de ciudades del país. El Parque de Etxebarria ocupa el espacio de una antigua fábrica metalúrgica de la que queda una antigua chimenea. Merece la pena visitar la zona de Pozas especialmente en los días en que juega el Athletic, el equipo de la ciudad, en el estadio de San Mamés. El ambiente es inmejorable. Otras zonas de visita obligada son la iglesia de San Antón, Puerto Viejo o el Funicular de Artxanda. Aunque la ciudad en sí no tiene playa, hay estupendos municipios costeros cerca de la ciudad que te permitirán darte un chapuzón o pasear tranquilamente por la orilla.

San Sebastián-Donostia es una ciudad mimada por el mar Cantábrico, una Atlántida emergida cuya intensa vida avivan olas y mareas. Sus calles y avenidas están volcadas hacia su bahía, el puerto y las playas.

Lugares de interés:
La Bahía de la Concha, su paseo es mundialmente famoso y cita obligada para los lugareños y visitantes, la fachada barroca de la basílica de Santa María, la Iglesia de San Vicente, el Centro Cultural Koldo Mitxelena, el Aquarium, el Centro de Talasoterapia la Perla...

Qué hacer:
Vete de pintxos por la parte Vieja. Visita el Mercado de la Brecha, es perfecto para adquirir productos gastronómicos de primera calidad. La bahía de la Concha es el gran polideportivo de la ciudad. En sus aguas se practican el surf, la vela y el piragüismo. También cuando haya marea baja podrás practicar partidos de fútbol y voleibol.

La capital cántabra, Santander, está situada en una hermosa bahía, cuyo puerto sostiene un gran tráfico marítimo. Posee a su vez un gran aeropuerto y se vanagloria de ser una ciudad abierta y cosmopolita. Sus museos, ferias taurinas, casino de juegos en el incomparable marco del puerto deportivo del Sardinero, junto con sus importantes instalaciones deportivas, hacen de Santander una ciudad extremadamente atractiva para el ocio.

Lugares de interés:
Visita obligada a su catedral. También el puerto tiene su historia: la Ciudad de Santander fue creada por los romanos, quienes la fundaron en un pequeño trozo de tierra que se adentraba en el mar. A pocos kilómetros de la ciudad se encuentra Santillana del Mar, bellísima localidad de calles y casas medievales.

Qué hacer:
La belleza de Santander no es lo único que hace de esta ciudad imprescindible, sino que el ambiente y la noche santanderina dan mucho que hablar a aquellos que la conocen. El paisaje, los locales de moda y sobre todo su gente consiguen embrujar a los visitantes.

Santillana del Mar

En la costa occidental de Cantabria se encuentran dos de los más preciados tesoros culturales de cuantos puedan encontrarse en esta región: Santillana del Mar y las cuevas de Altamira. Santillana del Mar, a unos 30 km de Santander, es un museo vivo de una villa medieval desarrollada entorno a la colegiata de Santa Juliana, aunque la mayoría de sus caseríos corresponden a las diversas aportaciones arquitectónicas de los siglos XIV al XVIII.

Entre los monumentos que se pueden visitar destacan las torres de Merino y Don Borja, dos de los edificios civiles más antiguos de la localidad. Por las calles de Santilla, medievales y empedradas, suele haber talleres artesanos. Es típico merendar leche con bizcochos. También destaca la naturaleza que hay y la costa, óptima para la pesca.

A 2 km de Santillana se encuentra otro gran tesoro artístico de Cantabria: las cuevas de Altamira, universalmente reconocidas. Descubiertas en 1879 por Marcelino Sanz de Sautuola y su hija María, han sido declaradas por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. La cueva, de unos 300 metros de longitud, contiene unos 150 grabados, expresión artística del hombre del paleolítico. Las pinturas son policromas a base de pigmentos naturales que se han conservado desde la edad cuaternaria; destacan las figuras de bisontes y ciervos.

El valle de Covadonga se encuentra situado al Norte de los Picos de Europa, a unos 11 kilómetros de Cangas de Onís. El conjunto de la montaña de Covadonga es el origen del Parque Nacional de los Picos de Europa, declarado en el año 1918 un espacio natural protegido.

Qué hacer

Covadonga cuenta con el conjunto monumental más visitado de Asturias:
La Santa Cueva: Capilla Sagrario con la imagen de la Virgen de Covadonga y la tumba de Don Pelayo.
Basílica de Santa María la Real de Covadonga: situada junto a la Santa Cueva. Ideada por Roberto Frassinelli y levantada entre 1877 y 1901 por el arquitecto Federico Aparici y Soriano, de estilo neorrománico construida íntegramente en piedra caliza rosa. En la explanada también encontraremos la casa capitular, la estatua de bronce de don Pelayo de 1964 del escultor Eduardo Zaragoza, "La Campanona" (campana de tres metros de altura y 4.000 kilos de peso), y el obelisco con la réplica de la Cruz de la Victoria de 1857.

¡Bienvenidos a Portugal, donde el sol siempre brilla más fuerte, el bacalao es una religión y el sonido del fado te toca el alma! Este pequeño país es grande en encanto y diversidad. Desde las playas doradas del Algarve hasta los callejones adoquinados de Lisboa y las bodegas de Oporto, Portugal es un viaje inolvidable. Sus castillos cuentan historias centenarias, sus pastelerías endulzan la vida y su vino de Oporto es como un abrazo en forma de bebida. Así que prepárate para explorar, saborear y enamorarte de Portugal, ¡donde cada rincón te invita a vivir al ritmo del fado y la saudade!

Qué hacer

Aquí tienes algunas cosas que ver y hacer en este encantador país:

1. Lisboa: Explora la capital de Portugal, con sus calles adoquinadas, el Barrio de Alfama, la Torre de Belém y el Monasterio de los Jerónimos.

2. Oporto: Descubre la ciudad de Oporto, conocida por su vino de Oporto, la ribera del río Duero y la animada Ribeira.

3. Playas del Algarve: Relájate en las hermosas playas de arena dorada y aguas cristalinas del sur de Portugal, en lugares como Lagos, Albufeira y Faro.

4. Sintra: Visita el Palacio Nacional de Sintra y el Palacio da Pena en esta ciudad encantadora, que parece sacada de un cuento de hadas.

5. Madeira y Azores: Explora las islas volcánicas de Madeira y las Azores, que ofrecen paisajes naturales impresionantes, senderismo y aventuras al aire libre.

6. Douro Valley: Disfruta de un recorrido por el Valle del Duero, famoso por sus viñedos en terrazas y catas de vino de Oporto.

7. Évora: Descubre la ciudad histórica de Évora, con su Templo de Diana, la Capilla de los Huesos y sus murallas medievales.

8. Gastronomía: Prueba la deliciosa cocina portuguesa, como el bacalao a la brasa, el arroz de mariscos, los pasteles de nata y, por supuesto, el vino de Oporto.

9. Fado: Asiste a una actuación de fado, el género musical tradicional de Portugal que expresa la saudade, una melancolía única.

10. Ruta del Camino de Santiago: Si eres un entusiasta de las caminatas, puedes unirte a la Ruta del Camino de Santiago, que pasa por Portugal en su camino hacia Santiago de Compostela en España.

11. Castillos y Palacios: Explora castillos como el Castillo de los Moros en Sintra y el Castillo de Pena, así como el Palacio da Bolsa en Oporto.

12. Festivales: Participa en festivales como el Carnaval de Oporto, la Fiesta de San Antonio en Lisboa y las fiestas religiosas locales.

13. Deportes acuáticos: Disfruta del surf en la costa oeste de Portugal, o practica windsurf y kitesurf en lugares como Guincho.

14. Parques Nacionales: Explora parques nacionales como el Parque Nacional Peneda-Gerês, que ofrece senderismo y observación de vida silvestre.

Fechas importantes

Aquí tienes algunas fechas clave y fiestas típicas:

1. Carnaval (febrero/marzo): El Carnaval se celebra con desfiles coloridos y festividades en todo el país, siendo el Carnaval de Ovar uno de los más famosos.

2. Semana Santa (marzo/abril): Las ciudades y pueblos de Portugal celebran la Semana Santa con procesiones religiosas y eventos tradicionales.

3. Festival de los Santos Populares (junio): La noche de San Juan (Noche de São João) el 23 de junio es especialmente animada en Oporto, con hogueras, música y sardinas asadas.

4. Fiesta de Santo António (13 de junio): Lisboa celebra a su patrón, Santo António, con desfiles, música y eventos festivos en toda la ciudad.

5. Festival do Vinho do Porto (septiembre): Oporto acoge este festival del vino de Oporto, donde puedes degustar una variedad de vinos.

6. Festival Internacional de Chocolate de Óbidos (febrero/marzo): Los amantes del chocolate disfrutarán de este festival que ofrece esculturas de chocolate, degustaciones y más.

7. Festival de Fado (octubre/noviembre): El Festival de Fado en Lisboa celebra este género musical tradicional portugués.

8. Natal (Navidad): Portugal celebra la Navidad con mercados festivos, belenes y eventos religiosos.

9. Nochevieja (31 de diciembre): La víspera de Año Nuevo se celebra con fuegos artificiales y celebraciones en todo el país, especialmente en Lisboa y Oporto.

10. Fiestas de los Santos Inocentes (28 de diciembre): En algunas regiones, como Alcobaça, se celebran festivales cómicos en honor a los Santos Inocentes.

Gastronomía típica

Aquí tienes algunos platos y alimentos típicos de Portugal que debes probar:

1. Bacalao a la Brasa (Bacalhau à Brás): El bacalao es una parte fundamental de la cocina portuguesa. Esta receta lo combina con huevos, cebolla, patatas y aceitunas.

2. Sardinas Asadas (Sardinhas Assadas): Las sardinas frescas asadas son un manjar durante el verano, especialmente en festivales como la Noche de San Juan.

3. Francesinha: Originaria de Oporto, esta es una sándwich de carne relleno con jamón, salchichas y bisteques, todo cubierto con una salsa picante y queso derretido.

4. Arroz de Pato: Un arroz de pato con un toque crujiente por encima, gracias a la costra de pan rallado y especias.

5. Pasteles de Nata: Los pasteles de nata son pasteles de hojaldre rellenos de crema de huevo y canela. Son un postre nacional y delicioso.

6. Caldo Verde: Una sopa espesa de col rizada, patatas y trozos de chorizo. Es un plato reconfortante y sabroso.

7. Carne de Cerdo a la Alentejana (Carne de Porco à Alentejana): Cerdo marinado y almejas se combinan en este plato tradicional del sur de Portugal.

8. Polvo a la Lagareiro: Pulpo asado al horno con aceite de oliva y ajo. Es simple pero delicioso.

9. Queijo da Serra: Este queso de oveja de la región de Serra da Estrela es suave y cremoso cuando está maduro. Se sirve a menudo con mermelada de frutas y pan.

10. Vino de Oporto: Portugal es famoso por su vino de Oporto, que puedes degustar en bodegas de Oporto y en todo el país.

11. Bifana: Un bocadillo de cerdo adobado en un bollo. Es una comida rápida popular en Portugal.

12. Amêijoas à Bulhão Pato: Almejas cocidas en ajo, cilantro y vino blanco. Es un plato delicioso y fresco.

13. Cataplana: Un guiso de mariscos cocidos en una olla especial llamada "cataplana".

14. Queijo de Azeitão: Un queso de oveja de Azeitão que es suave y mantecoso.

Otra información de interés

Aquí tienes información importante para planificar tu viaje a Portugal:

Moneda: La moneda oficial es el Euro (EUR). Los cajeros automáticos son ampliamente accesibles, y la mayoría de los lugares aceptan tarjetas de crédito.

Visado: Los ciudadanos de la Unión Europea (UE) no necesitan visado para ingresar a Portugal. Para la mayoría de los países, las estancias turísticas de hasta 90 días no requieren visado, pero verifica los requisitos específicos según tu nacionalidad antes de viajar.

Vacunas: No se requieren vacunas específicas para ingresar a Portugal. Asegúrate de estar al día con las vacunas de rutina antes de viajar.

Clima: Portugal tiene un clima mediterráneo, con veranos cálidos y secos, e inviernos suaves y húmedos. El clima varía según la región, así que verifica el pronóstico antes de viajar.

Electricidad: Portugal utiliza un voltaje de 230V y enchufes de tipo C y F. Si tus dispositivos utilizan un voltaje diferente, es posible que necesites un adaptador de enchufe.

Idioma: El idioma oficial es el portugués. En áreas turísticas, como Lisboa y Oporto, muchos hablan inglés, pero aprender algunas frases en portugués puede ser útil y apreciado.

Hora local: Portugal se encuentra en la Zona Horaria de Europa Occidental (GMT+0 en invierno y GMT+1 en verano durante el horario de verano).

Seguridad: Portugal es generalmente un país seguro para los viajeros. Como en cualquier lugar, toma precauciones normales para cuidar tus pertenencias y asegurarte de estar seguro.

Transporte: Portugal tiene un sistema de transporte bien desarrollado que incluye trenes, autobuses y tranvías. El transporte público es eficiente en las ciudades principales, y puedes alquilar un coche para explorar áreas rurales.

Propinas: En los restaurantes, es común dejar una propina del 10% si el servicio no está incluido en la factura. También es costumbre dar propina a los taxistas y al personal de hoteles si recibes un buen servicio.

Portugal, un país que combina historia, belleza natural y una rica cultura gastronómica, te espera con los brazos abiertos. Desde las soleadas playas del Algarve hasta las calles adoquinadas de Lisboa y Oporto, este país te cautivará con su encanto y diversidad. Su cocina deliciosa, su vino de Oporto y su hospitalidad te dejarán con recuerdos inolvidables. Explora ciudades históricas, relájate en playas idílicas, y descubre la riqueza de su patrimonio cultural. Portugal es un destino que te sorprenderá en cada esquina. ¡Prepárate para disfrutar de la magia de Portugal y su estilo de vida relajado y auténtico!

Lisboa, la encantadora capital de Portugal, deslumbra con su fusión única de historia y modernidad. Sus calles empedradas serpentean entre colinas, revelando barrios como Alfama y Bairro Alto, cargados de autenticidad y nostalgia. La arquitectura adornada con azulejos, la Torre de Belém y el Castillo de San Jorge cuentan historias centenarias. La melancolía del fado envuelve las noches, mientras que las plazas como Rossio ofrecen vida y energía. Lisboa, con su rica herencia marinera y una escena cultural vibrante, invita a perderse en sus callejones, saborear la cocina exquisita y sentir la calidez de su abrazo atlántico.

Qué hacer

Aquí tienes algunas sugerencias sobre qué ver y hacer en esta ciudad atlántica:

• Barrio de Alfama: Explora las estrechas calles de este antiguo barrio, impregnado de autenticidad y con el Castillo de San Jorge como telón de fondo.

• Torre de Belém: Contempla esta joya arquitectónica a orillas del río Tajo, que sirvió como punto de partida para los exploradores portugueses.

• Monasterio de los Jerónimos: Admira este magnífico monasterio, un ejemplo del estilo manuelino, declarado Patrimonio de la Humanidad.

• Tranvía 28: Realiza un pintoresco recorrido en el famoso tranvía 28, que serpentea por las colinas de la ciudad.

• Elevador de Santa Justa: Sube en este ascensor de hierro forjado para disfrutar de vistas panorámicas de Lisboa.

• Chiado y Bairro Alto: Descubre estos animados barrios, llenos de tiendas, restaurantes y vida nocturna vibrante.

• Plaza del Comercio: Contempla esta impresionante plaza junto al río, rodeada de edificios coloridos y el Arco Triunfal.

• Museo Nacional del Azulejo: Sumérgete en la historia de los azulejos portugueses en este fascinante museo.

• Catedral de Lisboa: Visita la catedral más antigua de la ciudad, con una mezcla de estilos arquitectónicos.

• Oceanario de Lisboa: Explora uno de los acuarios más grandes del mundo, ubicado en el Parque de las Naciones.

Oporto, la joya del norte de Portugal, despierta los sentidos con su encanto histórico, tradición vinícola y vistas panorámicas a orillas del río Duero. Las coloridas casas de la Ribeira reflejan la autenticidad de esta ciudad, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Famosa por sus bodegas de vino de oporto, Oporto ofrece degustaciones en Vila Nova de Gaia. La majestuosa Torre dos Clérigos y el icónico Puente Don Luis I son hitos que destacan en el horizonte. Oporto, con su ambiente acogedor y cultura vibrante, invita a explorar sus callejones empedrados y saborear la esencia portuguesa.

Qué hacer

Aquí tienes algunas sugerencias sobre qué ver y hacer en esta encantadora urbe:

• Ribeira: Explora el pintoresco barrio de Ribeira a orillas del río Duero, con sus estrechas calles empedradas y coloridas casas.

• Bodegas de vino de oporto: Realiza una visita a las bodegas de Vila Nova de Gaia para degustar el famoso vino de oporto.

• Puente Don Luis I: Admira este icónico puente de hierro que conecta Oporto con Vila Nova de Gaia, ofreciendo vistas panorámicas.

• Torre dos Clérigos: Sube a esta torre barroca para disfrutar de impresionantes vistas de la ciudad.

• Catedral de Oporto: Visita la Sé Catedral, una de las más antiguas de Portugal, con una mezcla de estilos arquitectónicos.

• Estación de São Bento: Maravíllate con los impresionantes azulejos en esta estación de tren histórica.

• Palacio de la Bolsa: Explora este palacio neoclásico y su impactante Salón Árabe.

• Livraria Lello: Descubre una de las librerías más hermosas del mundo, conocida por su arquitectura única.

• Parque de la Ciudad: Relájate en este extenso parque urbano con lagos y jardines.

• Museo de Arte Contemporáneo de Serralves: Sumérgete en el arte contemporáneo en este destacado museo.

¡Bienvenidos a Coimbra, la ciudad que mezcla historia y juerga como ningún otro lugar en Portugal! Desde la majestuosa Universidad de Coimbra hasta las callejuelas empedradas de la Alta, te sentirás como en un viaje en el tiempo. Los estudiantes universitarios, vestidos con sus capas negras, dan vida a la escena, mientras que el Fado de Coimbra te hará sentir las emociones más intensas.

La comida es un espectáculo por sí misma: la chanfana y los pasteles de Santa Clara te harán chuparte los dedos. Además, ¿quién puede resistirse a un vino portugués? Si te apetece un toque natural, la montaña de Serra da Estrela está a un tiro de piedra. Coimbra, donde la historia se encuentra con la fiesta, te espera. ¡A por ello!

Qué hacer

Aquí tienes una lista de las principales atracciones y actividades:

1. Universidad de Coimbra: Explora la Universidad de Coimbra, una de las más antiguas de Europa. No te pierdas la Biblioteca Joanina y el aula magna. Además, puedes visitar el Museo de la Universidad de Coimbra.

2. Monasterio de Santa Cruz: Este hermoso monasterio es un importante sitio religioso y arquitectónico en la ciudad.

3. Alta de Coimbra: Pasea por las encantadoras calles empedradas y plazas del casco antiguo de Coimbra. Descubre la Sé Velha, la Catedral Vieja de Coimbra, y disfruta de las vistas panorámicas desde el Mirador de Santa Clara-a-Velha.

4. Fado de Coimbra: Disfruta de una actuación en vivo de Fado de Coimbra en uno de los restaurantes o bares tradicionales. Esta música es una parte esencial de la cultura de la ciudad.

5. Parque Verde do Mondego: Da un paseo o alquila una bicicleta para recorrer este hermoso parque a lo largo del río Mondego.

6. Museos: Además del Museo de la Universidad de Coimbra, puedes visitar el Museo Machado de Castro, que alberga una colección de arte y arqueología.

7. Jardín Botánico de la Universidad de Coimbra: Relájate en este hermoso jardín y descubre una amplia variedad de plantas y árboles.

8. Gastronomía: Prueba la deliciosa comida portuguesa en los restaurantes locales. No te pierdas la chanfana, la sopa de pedra y los pasteles de Santa Clara. Acompaña tu comida con un buen vino portugués.

9. Excursiones: Explora los alrededores de Coimbra, incluyendo la Sierra de la Estrella y las localidades cercanas, como Conímbriga, donde puedes visitar unas impresionantes ruinas romanas.

10. Vida nocturna: Experimenta la vida nocturna de Coimbra en los bares y discotecas frecuentados por estudiantes universitarios.

La Toja es una pequeña y paradisíaca isla situada en las Rías Bajas, en el corazón turístico de Galicia, frente al Grove y a 30 kilómetros de Pontevedra. Cubierta de vegetación y rodeada de un mar de agua límpida y cristalina entremezcla su belleza con el lujo y confort de los servicios presentes en ella.

Durante siglos fue utilizada por los vecinos de O Grove como lugar de pastoreo de su ganado así como para sus tareas agrícolas. Fue a raíz del descubrimiento en el siglo XIX de sus fangos termales y aguas medicinales que pasó a ser de propiedad privada para explotar sus bienes termales y se construyó el antiguo balneario que trajo consigo un aumento espectacular del turismo.

La Toja es conocida por su balneario y su oferta para el tiempo de ocio empezando por su Casino, y terminando por sus instalaciones deportivas: Club de Golf en primera línea de mar, pistas de tenis, paddle, tiro al vuelo, tiro con arco, piscinas, excursiones marítimas,...

Por lo que a monumentos se refiere, alberga una ermita consagrada a San Caralampio y la Virgen del Carmen, con planta original del siglo XII, que se caracteriza hoy en día por estar completamente recubierta de conchas de vieira en las que la gente suele dejar escrito su nombre.

¡Bienvenidos a Fátima, donde la fe se combina con un toque celestial de misterio! Este rincón de Portugal es un imán para los peregrinos de todo el mundo. En 1917, tres niños afirmaron haber tenido conversaciones divinas con la Virgen María, y desde entonces, esta pequeña localidad se ha convertido en un destino de peregrinación masiva.

Puedes visitar la Basílica de Nuestra Señora del Rosario, hacer una pausa en la Capilla de las Apariciones o simplemente empaparte del ambiente espiritual. Pero también, si buscas un poco de diversión celestial, puedes explorar los alrededores verdes y pacíficos de Fátima. En definitiva, Fátima es un lugar donde la espiritualidad se mezcla con un toque de magia portuguesa. ¡No te lo pierdas!

Qué hacer

En Fátima, un destino de importancia religiosa y espiritual en Portugal, hay varias actividades y lugares para explorar:

1. Santuario de Fátima: Visita el Santuario de Fátima, que incluye la Basílica de Nuestra Señora del Rosario y la Capilla de las Apariciones, donde se cree que la Virgen María se apareció a los tres pastores en 1917. Únete a las celebraciones religiosas y la recitación del rosario.

2. Museo de Fátima: Aprende más sobre la historia de las apariciones marianas y la importancia de Fátima en la fe católica en este museo cercano al santuario.

3. Cueva de Moeda: A unos 20 minutos en coche de Fátima, puedes explorar la Cueva de Moeda, una formación natural impresionante con hermosas estalactitas y estalagmitas.

4. Aljustrel: Visita el pueblo cercano de Aljustrel, donde vivieron los tres pastores y donde puedes explorar sus casas y aprender más sobre sus vidas.

5. Recorrido por los alrededores: Disfruta de un paseo o un viaje en bicicleta por los hermosos paisajes naturales que rodean Fátima, como el Bosque de Fátima.

6. Caminos de peregrinación: Muchos visitantes optan por caminar o hacer peregrinaciones desde lugares cercanos, como Lisboa o Porto, hasta Fátima como una muestra de devoción.

7. Compras y gastronomía: Explora las tiendas de recuerdos que ofrecen objetos religiosos y souvenirs. Prueba platos tradicionales portugueses en los restaurantes locales, como el bacalao y los pasteles de nata.

8. Visita a la Iglesia Parroquial de Fátima: Esta iglesia más antigua en la zona ofrece una experiencia religiosa más tranquila y auténtica.

Santiago de Compostela no es una ciudad de paso, sino un destino en sí mismo. Las calles de granito del precioso centro histórico de Santiago llevan hasta la iglesia más famosa de España, la Catedral de Santiago, de magnífico estilo barroco. Con el paso de los años, la ciudad ha ganado en belleza y encanto. Sigue los pasos de millones de peregrinos y ven a Santiago.

Qué hacer

La plaza más famosa de la ciudad es la del Obradoiro que constituye un conjunto espectacular de joyas arquitectónicas, entre las que destaca la Catedral de Santiago con su fachada de granito cubierta de musgo y sus imponentes torres gemelas. El Pazo de Xelmírez tiene un perfecto interior medieval. En la parte norte de la plaza, se encuentra el Hostal dos Reis Católicos que ahora se ha reconvertido en parador. En esta plaza también se encuentra el Pazo de Raxoi, de estilo neoclásico, que actualmente es la sede del ayuntamiento de la ciudad.

Al otro lado de la catedral, está la Praza da Quintana, la segunda más importante de la ciudad, plagada de edificios históricos como la Casa de la Parra.

En el centro de la Praza das Praterías se encuentra la Fuente de los Caballos. Esta plaza es más pequeña pero está rodeada de joyas de la arquitectura como, por ejemplo, la Casa de los Canónigos.

La fachada barroca del monasterio benedictino de San Martiño Pinairo, de una belleza increíble, domina la Praza da Inmaculada.

Es el cuarto país europeo más extenso después de Rusia, Ucrania y Francia y el segundo país más montañoso de Europa, tras Suiza. Cuenta con una población de 46,5 millones de habitantes aproximadamente, según datos de 2014 del Instituto Nacional de Estadística.

Política y administrativamente, España es en la actualidad una nación descentralizada organizada territorialmente en 17 comunidades autónomas. Su sistema de gobierno consiste en una Monarquía Parlamentaria, es decir, cuenta con un monarca hereditario que ejerce como Jefe de Estado (el Rey de España) y un parlamento bicameral, las Cortes Generales.

El legado de las diferentes culturas que han habitado y convivido en el territorio a lo largo de la historia (íberos, celtas, fenicios, romanos, visigodos, árabes, judíos, cristianos), junto con su predominante clima mediterráneo (aunque diverso a lo largo de su extensa geografía: desde montañoso al Norte, hasta tropical en la islas Canarias), convierten a España en un país de increíble valor cultural y geográfico que ofrece una experiencia única a todo el que quiera visitarla. El idioma oficial es el español, mientras que los cooficiales son el catalán, el gallego y el vasco.

Es por ello que España se mantiene desde hace años como el segundo país del mundo que recibe más visitantes extranjeros, tan sólo por detrás de Francia. Dentro de España, las comunidades más visitadas son Cataluña, Baleares, islas Canarias, Andalucía, Comunidad Valenciana y Madrid.

Cómo moverse

En España no tendrás problemas para moverte. Encontrarás varios aeropuertos donde llegar, como el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas o el Aeropuerto de Barcelona-El Prat, que son de los más importantes de Europa al recibir millones de viajeros al año. Además, el país cuenta con la segunda mayor red de alta velocidad ferroviaria del mundo desde el año 2010. También puedes moverte por la península y sus islas con autobús o líneas regionales de tren.

Fechas importantes

La fiesta nacional es el 12 de octubre, cuando se celebra un largo desfile militar, pero hay también otras festividades que no tienen pérdida y son muy recomendables. Una de las fiestas más famosas a nivel mundial son los Sanfermines de Pamplona durante la semana del 7 de julio. También son muy conocidas la fiesta de la Tomatina de Buñol en agosto, la Feria de Abril en Sevilla, las Fallas de Valencia en marzo, las Fiestas de San Isidro de Madrid en mayo o las Fiestas de la Mercè de Barcelona en septiembre. La lista es muy larga, también son importantes los Carnavales de Tenerife o la fiesta de Moros y Cristianos de Alicante.

Gastronomía típica

España presume de ser uno de los países donde mejor se come. Hay alimentos considerados como un emblema nacional, como el jamón o la tortilla de patatas. Cada región tiene sus propuestas gastronómicas que no dejan a nadie indiferente, como la paella valenciana, la fabada asturiana, el pa amb tomaquet de Cataluña, el gazpacho andaluz o el cocido madrileño. Si te gusta comer, no hay duda de que en este país te lo pasarás muy bien.

El clima

El clima en España es muy diverso según la zona donde te encuentres. Por lo general, la mayor parte de la península tiene una temperatura propia del clima mediterráneo, es decir, con temperatura suaves y precipitaciones irregulares menos en verano, cuando el calor es abundante. El norte, en cambio, tiene un clima oceánico, con lluvias constantes y temperaturas más bajas. Las Islas Canarias son conocidas por sus playas y su buen tiempo, correspondiente a un clima subtropical. 

Otra información de interés

En España utilizan el euro, la moneda oficial de la instituciones europeas. Para visitar este país, hay tres tipos de visados diferentes: el visado de tránsito aeroportuario, el visado uniforme de corta duración y los visados nacionales. Recomendamos visitar la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores para más información. 

Barcelona tiene personalidad propia, la ciudad respira, late, se mueve, es una ciudad para caminar, para sentir, tiene una luz especial que te envuelve. A un lado, encontramos la montaña y al otro el mar que define su carácter. La ciudad está llena de energía y la gente vive la vida en sus calles, en sus terrazas, gracias al fantástico sol que parece que nunca deja de brillar. Es el lugar perfecto para deambular y descubrir todos sus rincones y los secretos que esconde. Barcelona es única gracias a una combinación muy especial de diferentes culturas que dejan su huella en la ciudad, del mar y la montaña... Fruto de esa mezcla surgió la rumba catalana mezcla de la rumba flamenca, el rock & roll y la música cubana. Déjate llevar por su ritmo pegadizo y canta eso de Rambla pa'qui Rambla pa'lla, esa es la rumba de Barcelona...

Qué hacer

En Barcelona hay tanto que hacer que tienes dos opciones: quedarte a vivir o volver a visitarla una y otra vez. Hay varios paseos de "recorrido obligado". Uno es Passeig de Gràcia donde podrás contemplar los edificios más emblemáticos de la arquitectura de Antoni Gaudí, como la Pedrera o la Casa Batlló. Tampoco puede faltar un paseo por la Rambla desde Plaça Catalunya hasta el monumento a Colón para ser testigo de la mezcla que compone Barcelona, esta es la calle donde todo se une: turistas, barceloneses, mimos... No hay una calle igual en todo el mundo. Caminar por otra rambla, la del Raval, es toda una experiencia. Disfruta de la variopinta mezcla cultural de este barrio y tómate algo en una de las numerosas terrazas que la pueblan mientras observas a la gente pasar. Es un pasatiempo de lo más interesante. Otra opción es recorrer el Passeig de Sant Joan y pasar bajo el Arc de Trionf de camino al parque de la Ciutadella donde disfrutar de una tranquila tarde al sol. Otro parque que no debe faltar en la visita es el Parc Güell, mezcla de naturaleza y arquitectura modernista. Es como entrar dentro de un cuento. Un parque tal vez menos conocido es el Laberint d'Horta. Está un poco más alejado de los puntos clave de la ciudad pero merece la pena desviarse un poco del itinerario típico y perderse en el laberinto que da nombre al parque. Los amantes de la naturaleza también tienen cabida en Barcelona. En la misma ciudad se encuentra el Tibidabo, una montaña en la que podrás disfrutar de la naturaleza en estado puro. Además, tendrás la ciudad a tus pies y los más pequeños (y también los mayores) podrán divertirse en el parque de atracciones que lleva el mismo nombre que la montaña. Lo maravilloso de esta ciudad es que puedes estar en el Tibidabo y coger un tren para llegar a la playa tan sólo media hora después. Desde la Barceloneta hasta el Fòrum, hay playas para todos los gustos, desde más turísticas a más familiares y en todas encontrarás un estupendo chiringuito en el que refrescarte con una bebida fría. La vida de barrio en Barcelona también es muy importante y cada uno tiene personalidad propia. Descubre Gràcia con su acogedor ambiente más cercano a un pueblo que a una ciudad; la Barceloneta, el barrio de los pescadores; Poble Sec, a los pies de la montaña de Montjuïc o Poblenou, donde se mezclan los restos de la Barcelona industrial y la más moderna y actual. El barri Gòtic es, como su nombre indica, la parte más gótica de la ciudad. Sus calles laberínticas y su arquitectura te trasladarán a otra época. La Catedral o la Plaça Reial y las callejuelas que la rodean son dos de sus zonas más conocidas. Al otro lado del Gòtic, en el Born, se encuentra una de las iglesias góticas de referencia de Barcelona, Santa María del Mar. Tanto la iglesia como el barrio en el que se encuentra te dejarán fascinado.

Zaragoza es, desde sus orígenes, uno de los más importantes nudos de comunicaciones de toda España. Una comunidad moderna que convive con su historia. Es la capital de la Comunidad Autónoma de Aragón compuesta por las provincias de Huesca, Teruel y Zaragoza.

Qué hacer

Zaragoza tiene muchas cosas que ver además de el Pilar. Es posible visitar la Lonja de Mercaderes, el palacio de la Aljafería, el centro y otros muchos lugares que no deben perderse ni los turistas ni los zaragozanos.

La 'movida' zaragozana tiene mucho que ver con los universitarios. Salas de cine, Distintas zonas de marcha, restaurantes y discotecas son muy abundantes y demandadas.No hay que dejar Zaragoza sin conocer su jota. Las mejores -de alta escuela- se conocen en los festivales de octubre pero cualquier fiesta popular de barrio o de una localidad próxima, sirven para conocer de cerca los agudos sones de la canción baturra.

Tierra de montañas que contrastan con las inmensas playas de arena fina y el verde de sus campos. Cantabria tiene desde una rica vida cultural y moderna como la de su capital hasta pueblos y aldeas repartidos por toda su geografía en los que no ha pasado el tiempo. Desde San Vicente de la Barquera a Laredo nos encontramos con infinidad de playas de fina arena como las de El Tostader, Oyambres, Valderarenas, El Sardinero, Somo o Salvé que hacen las delicias de los bañistas.
El arte prehistórico tiene su más importante monumento en las cuevas de Altamira, que han sido denominadas como la Capilla Sixtina del arte cuaternario, y están situadas junto a Santillana del Mar, Actualmente, son las cuevas más importantes y famosas del Paleolítico a nivel mundial. La cueva de Altamira ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es una de las joyas más importantes de Cantabria y, probablemente de España, dado su reconocimiento universal.
Entre los elementos etnográficos más destacados de Cantabria están los hórreos, frecuentes en otro tiempo y que ahora podemos ver en muy contadas ocasiones, principalmente en pueblos de Liébana. Como elementos más destacados por exclusividad encontramos la pisa de Ledantes, la panera de Cades y el telar de Cabezón de Liébana.

Gastronomía:
El marisco es el máximo protagonista de la mesa regional. De gran variedad y calidad, gracias a las frías y limpias aguas de las que procede. Si bien puede conseguirse en toda la costa, es en la bahía de Santander donde se encuentran los mejores ejemplares. El orujo de Potes es como se conoce al extraordinario aguardiente que desde tiempo inmemorial se viene elaborando artesanalmente en la comarca lebaniega utilizando las alquitaras, recipientes de origen árabe.

Asturias es la consagración eterna de lo verde. Los múltiples matices de este color parecen abarcarla totalmente: montañas, valles, bosques. La humedad oceánica, común a toda la España abierta al Cantábrico favorece el paisaje y la vegetación.

A Coruña se eleva sobre una península rocosa abrazada por el océano Atlántico. Esta ciudad marinera por excelencia ha sido durante cientos de años la puerta de entrada y el puerto de numerosos pueblos que han dejado su legado en la historia, el arte, las leyendas y las tradiciones de la ciudad que, a su vez, se fusionan perfectamente con la modernidad.

Qué hacer

Hay mucho que ver y disfrutar en A Coruña. Puedes pasear por la parte vieja de la ciudad o descubrir su lado más modernista en el Ensanche. A Coruña tiene más de dos kilómetros de playa urbana. A lo largo de ella, se extiende el Paseo Marítimo que recorre playas, calas y acantilados. La playa de Riazor-Orán es una de las principales zonas de la ciudad. Cerca de la Torre de Hércules, se encuentran las calas de San Amaro y Lapas. Un impresionante espacio natural rodea la playa de Santa Cristina, a las afueras de la ciudad. Su magnífico entorno marítimo la convierte en la ciudad perfecta para la práctica de todo tipo de deportes acuáticos. El Obelisco es el punto de encuentro de los coruñeses desde hace años. Desde el Castillo de San Antón, que se encuentra en un islote a la entrada de la ría, siguiendo el puerto se llega hasta la Torre de Hércules, símbolo de la ciudad, que constituye un museo al aire libre rodeado de leyendas y mitos. Además, por la noche se ilumina y hace las funciones de faro. El Paseo Marítimo es conocido como la Ciudad Acristalada debido a la gran cantidad de balcones acristalados que allí se concentran. La Iglesia de Santa María y Santiago es la más antigua de la ciudad, de estilo románico. Un recorrido por las calles de la Ciudad Vieja te trasladará a otra época donde podrás respirar el ambiente de la ciudad más medieval. En el centro de A Coruña, se encuentra la Plaza de María Pita en honor a la heroína que salvó la ciudad. La plaza está rodeada por arcos que permiten refugiarse tanto de la lluvia como del sol. Uno de los laterales está ocupado por el edificio del Ayuntamiento con sus imponentes tres torreones coronados por enormes cúpulas.

Pontevedra es una de las cuatro capitales de las provincias gallegas. Limita con La Coruña, Lugo, Orense, Portugal y el océano Atlántico.

Para conocer Pontevedra lo mejor es comenzar por el Caso Histórico, declarado conjunto histórico en el año 1951. Desde la Alameda se inicia un recorrido monumental lleno de historia y cuenta con un paseo y zona verde. Junto a la Alameda encontramos las famosas ruinas del Convento de Santo Domingo y en la otra dirección, la Basílica de Santa María, de estilo gótico renacentista. También encontramos la Iglesia de San Bartolomé de estilo barroco, el Convento de Santa Clara de estilo ojival, la Iglesia de San Francisco, donde se guardan varios sarcófagos como el del almirante del mar y poeta medieval Paio Gómez Chariño y la Iglesia de la Peregrina, relacionada con el camino portugués a Santiago.

Entre sus plazas destaca los Soportales da Ferrería con su monumental fuente, la Plaza de la Leña o la de la Verdura, la Plaza de las Cinco Calles y la Nuñez, donde se encuentra la casa en la que vivió el escritor Ramón María del Valle Inclán. La Plaza de la Estrella junto con la Plaza de la Herrería y los jardines de Casto Sampedro forman un paisaje característico.

También se puede visitar el Museo Provincial de Pontevedra fundado en 1927 e instalado en unos pazos levantados en el último tercio del siglo XVIII. El Puente de Burgos es el monumento más destacado de la ciudad, ya que dio origen al nombre de Burgos y aparece en el escudo de la ciudad.

El casco antiguo de la ciudad puede visitarse también en un tren urbano que enseña los puntos más turísticos en un recorrido de 45 minutos.

Las fiestas más destacadas de Pontevedra son las Fiestas de la Peregrina en el mes de agosto y la Fiesta de San Benitiño de Lerez el 11 de julio, en la que acuden los devotos en búsqueda de la cura de algún mal como las verrugas.

Dentro de la gastronomía de Pontevedra se destaca el marisco acompañado por el vino característico de la tierra, el Albariño.

Lugo, capital de provincia, se ubica en el extremo noroeste de la Península Ibérica, al lado del río Miño. Con la Facultad de Veterinaria, Lugo se ha convertido en una de las principales urbes universitarias de Galicia, sólo superada por Santiago.
La Muralla Romana de Lugo es un conjunto histórico único en el mundo, ya que no hay otra muralla de su época que haya conservado íntegro su perímetro. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad en noviembre de 2000.
También las Termas Romanas, situadas a orillas del Río Miño, son un monumento imprescindible en las visitas.
Destacan además el Museo y Castro de Viladonga; la Catedral de Lugo, donde mantienen el Santísimo en exposición permanente; el Ayuntamiento, una de las obras más características del Barroco Gallego.
El Camino Francés y el Camino Primitivo del Camino de Santiago cruzan de parte a parte la provincia y han dejado un legado de monasterios e iglesias románicas de gran interés.
El litoral lucense cuenta con varias playas, aptas para el baño y muy poco frecuentadas a causa del clima de la zona. Por ello conservan todo su encanto y es una buena opción de tranquilidad.
Entre los platos típicos de Lugo y provincia están el pulpo á feira, el caldo gallego, la empanada, las truchas... En cuanto a la repostería destacan las filloas, los freixós y las orellas.

Madrid, la capital de España, está situada justo en el corazón de la península. Sus varios millones de habitantes disfrutan de la vida en una ciudad cosmopolita, centro cultural y de negocios, con una intensa actividad tanto de día como de noche, sobre todo, de noche. Si vienes a Madrid encontrarás mil maneras de aprovechar cada segundo de tu estancia. Podrás visitar increíbles galerías de arte, ir de tapeo en cualquiera de sus numerosos bares, disfrutar de música en directo, relajarte en sus parques o maravillarte con sus espectaculares atardeceres de tonalidades azules y naranjas en los que se recorta la silueta de la nueva torre diseñada por el arquitecto Norman Foster.

Qué hacer

Madrid siempre será recordada por la Movida de los 80 pero, aunque esta época ya pasó, su espíritu sigue vivo en el barrio de Malasaña con sus pubs, salas de conciertos y el ambiente que se respira en las calles. Además, el barrio está lleno de tiendas vintage, restaurantes de todo tipo, centros culturales y locales de diseño. Si lo tuyo son los museos, no puedes perderte el Museo del Prado, uno de los más importantes del mundo, en el que podrás admirar la obra de Velázquez, Goya o Rembrandt.

Si prefieres el arte contemporáneo, no puedes perderte el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía que, además de su colección permanente, organiza exposiciones temporales. Pero digamos que lo que más te gustan son los musicales. En Madrid, lo tienes fácil. Dirígete a cualquiera de los numerosos teatros de la Gran Vía, una de las arterias de la ciudad donde se combinan cultura, comercio y arquitectura. En un día soleado, la mejor opción es pasear por el precioso Parque del Retiro y dar una vuelta en las barcas que se pueden alquilar en el lago artificial para remar junto a los patos.

Una vez en el centro, no te puedes perder la Plaza Mayor con sus arcos y sus preciosas fachadas. Piérdete por las callejuelas que la rodean antes de seguir hasta la Puerta del Sol, donde se encuentra el kilómetro cero, punto de partida de las carreteras españolas, y el famoso reloj que da las campanadas en Nochevieja para recibir el año nuevo.

Valencia es una hermosa ciudad en la costa mediterránea de España, conocida por su arquitectura impresionante, sus playas doradas y su vibrante cultura. La ciudad es una mezcla perfecta de lo antiguo y lo moderno, donde los visitantes pueden descubrir la rica historia y la cultura tradicional española mientras disfrutan de las comodidades de una ciudad moderna.

Uno de los lugares más emblemáticos de Valencia es la Ciudad de las Artes y las Ciencias, una impresionante colección de edificios futuristas diseñados por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava. La Ciudad de las Artes y las Ciencias cuenta con una gran cantidad de atracciones, como un planetario, un acuario, un museo de ciencias y un teatro de ópera.

El centro histórico de Valencia es otro punto destacado, con una rica historia que se remonta a la época romana. Los visitantes pueden recorrer las calles empedradas, admirar la arquitectura medieval y disfrutar de la gastronomía local en los muchos restaurantes y bares de la zona. La Plaza de la Reina y la Catedral de Valencia son dos de las atracciones más populares del centro histórico.

La playa de la Malvarrosa es una de las playas más famosas de Valencia, con su amplia extensión de arena dorada y sus aguas cristalinas. Los visitantes pueden disfrutar de un día de sol y mar, practicar deportes acuáticos o relajarse en los muchos chiringuitos y bares de la playa.

La gastronomía valenciana es otra atracción turística importante de la ciudad. Valencia es el hogar de la famosa paella, un plato de arroz español que se prepara con una variedad de ingredientes. Los visitantes pueden probar la paella en uno de los muchos restaurantes de la ciudad, así como disfrutar de otros platos tradicionales como la fideuà y el all i pebre.

Además, Valencia es una ciudad llena de vida y energía, con una amplia variedad de eventos culturales y festivales que tienen lugar durante todo el año. El Festival de las Fallas es uno de los eventos más famosos, donde las calles de la ciudad se llenan de enormes esculturas de papel maché y se celebran espectáculos pirotécnicos.

En resumen, Valencia es una ciudad vibrante y emocionante, llena de historia, cultura y belleza natural. Los visitantes pueden disfrutar de una amplia variedad de atracciones turísticas y actividades, desde la exploración de la arquitectura impresionante hasta la relajación en la playa y la degustación de la deliciosa gastronomía local.

Es Córdoba, con todo lo que se ha hablado de ella y lo apreciada que es en el mundo entero, una sorpresa aún mayor cuando se conoce su pasado. Impresiona la Mezquita como síntesis cultural y como uno de los más excepcionales monumentos del planeta, sus bellos patios profusamente decorados de flores, sus atardeceres lánguidos y rosados; impresiona el silencio de sus pintorescas callejuelas y tantos otros monumentos. Porque una visita a Córdoba y su provincia depara sorpresas y merece tomarse el tiempo.

Lugares de interés:
Por supuesto, la visita a la Mezquita es imprescindible. Una vez allí, no dejes de recorrer la Calleja de las Flores, desde donde se disfruta de una bella perspectiva de la torre de la Catedral, lugar que también merece una visita. El Alcázar de los Reyes Cristianos, la Judería... y, sin duda, el Palacio de Viana, una casa museo que merece el nombre de "Museo de los Patios".

Qué hacer:
Los alrededores de Córdoba se caracterizan por sus pacíficas colinas repletas de olivares y la llanura tenue con los cultivos de cereales, los grandes viñedos de Montilla-Moriles y los almendros, que en enero y febrero, todos en flor, ofrecen una bellísima panorámica. Hay que conocer el Palacio de Medina Azahara, los alegres pueblos de la Sierra Norte y los Valles del Sur.

Quien fue a Sevilla... Se enamoró de su belleza y del encanto que desprende gracias a su gastronomía, a sus naranjos, a sus patios en los que el tiempo parece detenerse y, sobre todo, a la amabilidad y la alegría de sus gentes que disfrutan de la vida en sus calles con una buena cervecita fría y muchas risas. La ciudad de la luz y del color te espera a orillas del Guadalquivir para que descubras sus rincones escondidos y sus amaneceres junto a la Giralda. Todo sin prisa, empapándote del olor a azahar.

Esta impresionante ciudad desprende embrujo por todos sus rincones, en la Alhambra, en el Albaycín, en sus callejuelas laberínticas de espíritu morisco y olor a incienso; los colores de la mitología andaluza, el azul, verde, el rojo... se mezclan en Granada. Sus gentes contagian la alegría de su carácter extrovertido. La pasión, la magia, la poesía se respiran en el ambiente.

Qué hacer

El antiguo barrio árabe de la ciudad, el Albaycín, es uno de los lugares que no te puedes perder. Una vez allí, en el mirador de San Nicolás disfrutarás de unas magníficas vistas. La Catedral también es una visita obligada así como las callejuelas que la rodean. Un momento mágico es ver la puesta de sol sobre la Alhambra, es una vista sobrecogedora que no olvidarás jamás. Al planear la visita a la Alhambra, hay que tener en cuenta que hay turnos, de mañana, de tarde y de noche, y que necesitarás varias horas para disfrutarla entera. El número de visitantes es limitado, así que se recomienda comprar la entrada con antelación. Tampoco te puedes perder la Cartuja o el Parque García Lorca. En el Sacromonte debes visitar una de las cuevas tradicionales en las que vivirás el flamenco en estado puro. También es posible dormir en una de estas cuevas. Para descansar de tanta caminata, nada mejor que relajarse un rato en los Baños árabes y viajar atrás en el tiempo, a la época árabe de Granada. También puedes reponer fuerzas en una de las numerosas y encantadoras teterías granadinas.

Asturias es la consagración eterna de lo verde. Los múltiples matices de este color parecen abarcarla totalmente: montañas, valles, bosques. La humedad oceánica, común a toda la España abierta al Cantábrico favorece el paisaje y la vegetación. Oviedo está situado en la zona central del Principado de Asturias, ocupando una posición estratégica entre los ríos Nalón y Nora.

Qué hacer

En el centro de Oviedo se pueden contemplar algunos ejemplos del arte prerrománico asturiano: la Cámara Santa de la Catedral, por ejemplo, parte de la historia de los asturianos. También la Catedral gótica es un lugar de obligada visita. También el Palacio Arzobispal y la Universidad Vieja (ambas del siglo XVI) son claros ejemplos del arte renacentista.

El que haya estado alguna vez en Asturias y no haya probado la fabada o la sidra, no puede presumir de haber estado allí. Ambos productos son, sin duda alguna los más típicos del lugar. Oviedo, como cualquier otra ciudad universitaria, tiene mucha marcha durante el tiempo que dura el curso. Las zonas principales son la parte vieja , centrándose en las calles Corrada del Obispo y la Plaza del Paraguas.La gente joven prefiere otros nuevos lugares, como la calle Altamirano y la Plaza de Riego