Hotel Soggiorno Blu
Roma
15/10/2013
Positivo: Lo único que nos gustó de este hotel es la ubicación. A 1 minuto de la estación de Termini.
Negativo: A parte la ubicación, que era lo único bueno, el hotel no es un hotel, más bien una pensión. Está en la primera planta que el ascensor está de decorado. Cuando llegamos no nos abría nadie la puerta, después de un largo vuelo deseábamos llegar a la habitación y estuvimos esperando al menos 30 minutos y tuve que bajar a buscar a alguien que supiera como encontrar a la recepcionista, justo ella llegaba por la puerta y pudimos entrar. Más vale hablar inglés porque para entendernos fue una odisea. Nos cobraron 12 euros por 3 días además del precio de la habitación por la cuota local. Y además tuvimos que buscar céntimo a céntimo porque no tenia cambio de un simple billete de 20 euros... Por fin nos dio la llave pero tardamos 5 minutos en entrar porque aquella llave apenas funcionaba. La habitación para el precio que pagamos es muy caro. Habitación pequeña, un poco sucia, y la cama doble, para ellos son dos camas unidas... Luego el baño son 2 metros cuadrados y la ducha 1 metro cuadrado, la manguera de la ducha rota que echaba mas agua por la manguera que por donde tendría que salir. Nos duchabamos y el cuarto de baño realmente parecía un charco. La cortina solo tapaba la ducha y el WC. Y claro salpicaba agua hasta en el vecino de abajo. Solo daban dos toallas al día y ni siquiera se pasaron en 3 días a limpiar un poco la habitación. Nuestro balcón daba a un patio donde los restaurantes dejaban la basura y hacían bastante ruido. Para mí, fue una experiencia bastante desagradable, de haber pagado 240 euros y haberme sentido engañada. Para encender la luz cada vez que entrabamos en la habitación le echábamos un rato, porque la llave ya te digo, estaba rota. La recepcionista nunca estaba, y el servicio pésimo. No recomiendo este hotel "pensión", solo tienen un gran punto a su favor, y es su ubicación. Además si tenéis desayuno incluido, será en un bar en la calle de al lado, y será un café y un croissant que deja bastante que desear.